
El presidente Alberto Fernández pidió fortalecer la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (CELAC), mecanismo en el que ejerció la presidencia Pro Tempore durante el 2022, y reclamó acuerdos «más justos y equitativos» entre los bloques de países.
Además, remarcó la necesidad de eliminar las «asimetrías y desequilibrios existentes» entre las regiones presentes.
Lo hizo en el marco de la Cumbre entre la Unión Europea y la CELAC -hoy con el primer ministro de San Vicente y Granadinas Ralph Gonsalves al mando- celebrada en la ciudad de Bruselas, capital de Bélgica, y configura así su última participación de su gestión ya que se trata de un evento que tiene lugar cada ocho años.
«La Argentina es parte de esta comunidad, con la profunda convicción de que el trabajo mancomunado, que valora la riqueza cultural de la región, robustece nuestra voz en el escenario global», remarcó el mandatario.
En otro pasaje del discurso, el Presidente cuestionó además al Fondo Monetario Internacional (FMI) y responsabilizó al exmandatario Mauricio Macri, sin mencionarlo de forma directa, por haber contraído la deuda que el Gobierno aún renegocia con la entidad de crédito.
Tras enumerar las consecuencias de la pandemia, en un incremento de la inseguridad energética y alimentaria, remarcó que la Argentina se sumó el endeudamiento. Ante la mirada atenta de sus pares, el jefe de Estado remarcó que se trató de una deuda que su gobierno «jamás hubiera asumido, pero que afronta con mucho esfuerzo y profunda responsabilidad».
«Así actuamos, pero todos deben saber que estamos convencidos de que ninguna reestructuración de deuda puede marginar a los empobrecidos, ni postergar los sueños ni el futuro de un país», expresó en el marco de las negociaciones que encabeza el ministro de Economía y precandidato a presidente por Unión por la Patria, Sergio Massa.
Aprovechó además para dar continuidad al debate con la UE respecto al acuerdo comercial con el Mercosur, firmando en 2019, pero empantanado por las condiciones del mismo. «Celebro que Europa, parte del norte desarrollado, mire con vocación integradora al Caribe y a la América Latina, parte del sur que quiere desarrollarse. El acto de asociación supone la existencia de partes que se entienden en la búsqueda de un desarrollo equilibrado», remarcó.
Por último, planteó como tema prioritario consensuar posturas y colaborar de forma conjunta frente al impacto del cambio climático y las consecuencias del calentamiento global, bajo el compromiso de «promover una transición hacia una economía sostenible y respetuosa con el medio ambiente, teniendo en cuenta el principio de las responsabilidades comunes pero diferenciadas y las respectivas capacidades nacionales».