El procedimiento avanzó muy bien. Nosotros recibimos recién la alerta ayer a la mañana y la brigada de investigaciones, bajo la hipótesis de que este hombre intentaría llegar a Bolivia, comenzó a revisar los colectivos que llegan desde Buenos Aires”, explicó el funcionario en TN.

Sotacuro, de doble nacionalidad peruana y argentina, fue detectado en la terminal gracias a las cámaras de videovigilancia y al listado de pasajeros facilitado por una empresa de transporte.

El sospechoso logró cruzar a Bolivia por un paso ilegal, evadiendo los controles oficiales. “Claramente ha cruzado a unos 100 metros de la frontera formal, por un pequeño arroyo de un metro de ancho. Ese es un paso que usan tanto los vecinos para trabajar a ambos lados como el tráfico ilegal”, precisó Pulleiro.

La cooperación con las autoridades bolivianas fue clave: “Les pasamos los datos del pedido de captura y, revisando hoteles de manera conjunta, ellos procedieron a la aprehensión, mientras nosotros lo identificamos con su DNI en la mano”.

Tras completar los trámites de extradición, Sotacuro fue entregado a la policía jujeña durante la madrugada. “En este momento está siendo trasladado desde La Quiaca hacia San Salvador de Jujuy, para ser entregado a las autoridades federales y continuar el proceso judicial en Buenos Aires”, informó el ministro, destacando la rapidez y coordinación del operativo.