En los últimos meses, Añelo experimentó una serie de catorce sismos, generando preocupación en la comunidad y llamando la atención de expertos en sismicidad inducida. En Radio 7 hablamos con Javier Grosso, geógrafo del Observatorio de Sismicidad Inducida, para obtener más detalles sobre estos eventos.

Según Grosso, la actividad sísmica fue trasladándose por diferentes sectores, inicialmente afectando a Sausal Bonito y luego al Rincón de los Sauces. Desde fines de octubre, la concentración de sismos se desplazó al norte de Añelo, ubicándose a unos treinta y cinco kilómetros de la ciudad, en plena zona de Vaca Muerta.

El geógrafo destacó que estos sismos presentan algunas diferencias con respecto a los anteriores en Sausal Bonito. Son más profundos, alcanzando entre 7 y 10 kilómetros, lo que plantea un escenario distinto en términos de liberación de energía. Grosso enfatizó la importancia de caracterizar cada sismo de manera detallada, ya que no todos son iguales.

La pregunta recurrente ante estos eventos es si existe la posibilidad de un sismo mayor. Grosso señaló que la probabilidad aumenta, especialmente considerando que la energía sísmica se está liberando en distintos sectores y niveles de profundidad. Destacó que la actividad sísmica en la región de Vaca Muerta no es homogénea, y cada sismo está vinculado a intervenciones humanas que alteran el equilibrio preexistente.

En este contexto, el geógrafo subrayó la necesidad de prestar atención y realizar investigaciones más profundas sobre la sismicidad en la cuenca de Vaca Muerta.