“Elon podría recibir más subsidios que cualquier otro ser humano en la historia, por mucho, y sin subsidios, Elon probablemente tendría que cerrar el negocio y volver a su país, Sudáfrica”, escribió Trump en una publicación en Truth Social.

A continuación, arremetió: “No más lanzamientos de cohetes, satélites o producción de autos eléctricos, y nuestro país se ahorraría una fortuna. ¿Quizás deberíamos pedirle a DOGE que le eche un buen vistazo a esto? ¡Se ahorraría mucho dinero!”.

Las declaraciones tuvieron lugar cuando Musk amenazó con que los legisladores que apoyen al “gran y hermoso proyecto de ley” de Trump corren el riesgo de perder las primarias del año que viene, informó la agencia de noticias Xinhua.

En otra publicación, Musk comentó que apoyará al congresista republicano Thomas Massie, de Kentucky, a quien Trump criticó por votar en contra del proyecto de ley en la Cámara de Representantes.

Trump prometió hacer campaña contra Massie “con todas sus fuerzas” en las primarias del Partido Republicano, y prometió que “un maravilloso patriota estadounidense” contenderá contra él.

Tras su retirada del Departamento de Eficiencia Gubernamental en mayo, Musk atacó de forma intermitente el proyecto de ley.

Alertó que elevaría el techo de la deuda en 5 billones de dólares, “destruiría millones de puestos de trabajo en Estados Unidos y causaría un inmenso daño estratégico al país”.

El proyecto de ley también podría afectar directamente a la empresa de autos eléctricos Tesla de Musk, al eliminar los créditos fiscales a dichos vehículos, por hasta 4.000 dólares para un automóvil eléctrico usado y 7.500 dólares para uno nuevo. JPMorgan Chase calcula que la medida podría costar a Tesla 1.200 millones de dólares.

Musk rompió el sábado su breve silencio sobre el polémico plan fiscal de Trump, calificándolo de “absolutamente loco y destructivo”, mientras el paquete se abre camino en el Senado.

En respuesta, Trump escribió este martes en su red social Truth Social que Musk sabía que él estaba “firmemente en contra de la obligación de utilizar vehículos eléctricos” mucho antes de respaldarlo como candidato a la presidencia.

“Es ridículo, y siempre fue una parte importante de mi campaña. Los coches eléctricos están bien, pero no se debe obligar a todo el mundo a tener uno”, aclaró finalmente Trump.