
La última vez que el «Xeneize» saboreó una victoria fue el 19 de abril, un hito que marca el inicio de esta preocupante sequía que mantiene en vilo a sus hinchas.
Desde aquel 19 de abril, el panorama en el mundo y el país ha cambiado significativamente, mientras la incertidumbre se apodera del club de la Ribera.
En aquel entonces, el Papa Francisco seguía siendo el líder del Vaticano y el expresidente uruguayo José «Pepe» Mujica aún vivía, figuras que marcaban la agenda global y regional.
La última vez que Boca ganó un partido oficial, el escenario local también era distinto. El dólar cotizaba a $1.100, muy por debajo de su valor actual. Además, en el ámbito cultural, la serie «El Eternauta», protagonizada por Ricardo Darín y que se convertiría en un furor en Netflix, aún no había estrenado.
En el mundo del deporte, específicamente en el automovilismo, Franco Colapinto todavía era piloto de reserva y no había debutado oficialmente con Alpine. En el fútbol local, Platense aún no había conquistado su primer título en Primera División, y a nivel internacional, el PSG seguía sin sumar estrellas de Champions League a su palmarés.
Estas comparaciones no solo subrayan la extensión de la racha negativa de Boca, sino que también contextualizan el tiempo transcurrido desde aquel último festejo.