Verónica es víctima de violencia de género por parte de una ex pareja, pero no se limitó a lo físico, sino que sufrió todas las expresiones de la misma.

En diálogo con Radio 7, la mujer expresó: “Yo sufrí violencia de género, violencia económica, fui violada, tuve que hacerme un aborto voluntario. El señor Julio Néstor Gómez se quedó con todas mis pertenencias, muebles, cocina, lavarropa, me dejó sin nada”.

La violencia no solo fue a través de golpes, sino también económica ya que tomó préstamos a su nombre y sus ingresos no alcanzan a solventar las cuotas. Actualmente Verónica está resguardada en una vivienda del oeste neuquino y necesita donaciones para equipar su vivienda.

Todo comenzó en marzo del 2023 cuando Julio Néstor Gómez la habría privado de su libertad durante tres días, ejerciendo violencia física y sexual. Tiempo después la mujer encontró resguardo en una vivienda del oeste neuquino, sin embargo Gómez se enteró de su ubicación y la golpeó en tres oportunidades.

La violencia sexual hacia Verónica trajo como consecuencias un embarazo no deseado, por esta razón tuvo que realizar una interrupción voluntaria del embarazo.

Verónica indicó: “Me hice un aborto en el hospital y no recibí ningún tipo de ayuda psicológica, ni psiquiátrica, me dieron las pastillas, casi aborto en la terminal de Plottier pero conseguí la casa de un amigo y tuve que terminar el aborto en la casa de un amigo”.

A raíz de toda esta situación, Verónica realizó las denuncias correspondientes y llamados para la asistencia estatal a víctimas de violencia de género.

“La única acción que tomaron fue cuando vino 3 veces a golpearme, la policía lo volvía a soltar, me volvía a pegar hasta que una persona lo agarró y me lo sacó de encima a la fuerza. Por eso tiene tobillera ahora, lo único que sé es que vive en Valentina Sur”, explicó Verónica.

Actualmente Verónica está con licencia por violencia de género y necesita ayuda para equipar su hogar y poder comenzar de nuevo. Debido al robo de sus pertenencias por parte del denunciado, Verónica pide donaciones de sillas, mesa, colchón, pava, utensillos, heladera, cocina, cama, ropa de cama y todo lo que pueda servir para la vida cotidiana.

“La verdad que no puedo hacer muchas cosas, la terapia la tomo en un lugar afuera porque no puedo estar encerrada, sinceramente la paso bastante mal. Actualmente estoy haciendo terapia psicológica. Todo lo que se dejó, es todo por lo que trabajé en mi vida”, concluyó.