
Los estudiantes, docentes y la comunidad de padres de la Escuela N°207 reclamaron este jueves volver al establecimiento educativo original del barrio Belgrano, luego de ser reubicados en el Centro Recreativo Nayahue por el derrumbe del galpón lindero. Actualmente, más de 400 alumnos cursan en condiciones precarias, una parte de ellos en aulas móviles.
En la actualidad, los estudiantes de primero a séptimo grado cursan en el Centro Educativo Nayahue ubicado en Boerr N°1200 debido al incendio de un galpón abandonado. Sin embargo, aún esperan el derrumbe de la estructura del galpón por el peligro que representa. Con las temperaturas bajo cero, varios grados debieron suspender las clases por no contar con la calefacción adecuada.
Desde la institución se informó que hoy jueves los cursos 7A, 6A, 6B, 4A y 5B no tuvieron clases por las bajas temperaturas. Docentes y directivos expresaron su preocupación por la salud del alumnado y del personal, al señalar el uso prolongado de los trailers no acondicionados pone en riesgo el bienestar físico y emocional de todos.
“Ya pasó más de un año de puras promesas y espera, los chicos la están pasando mal, al igual que los docentes muchos enfermos, con estás bajas temperaturas se deben suspender las clases de los cursos que se encuentran cursando en los trailers ya que las bajas temperaturas incrementan el frío” indicó el comunicado.
La convocatoria fue encabezada por las familias, el equipo directivo y los alumnos, quienes se manifestaron desde las 9:30 en la puerta del Nayahue para exigir una respuesta concreta a las autoridades provinciales. La protesta se realizó frente al anexo, donde dictan las clases actualmente en condiciones precarias.
El traslado se efectuó a partir del incendio del galpón lindero en estado de abandono, pese a las refacciones de fortalecimiento de la medianera, todavía no se llevó adelante el derrumbe final del galpón. Desde entonces, la comunidad educativa permanece fuera de su sede habitual, a la espera de decisiones judiciales y acciones concretas que permitan recuperar el espacio original.
Karina Leiva, presidenta de la Comisión Vecinal del barrio Belgrano, expresó: “El galpón sigue clausurado de forma preventiva, pero nadie actúa. No hay sereno, el predio está vulnerable y se siguen metiendo personas en situación de calle”.
“No son trailers acondicionados para que puedan ser utilizados por los chicos como escuela, sino que era algo temporal, pero lo temporal ya se volvió más de un año y la verdad que las únicas noticias que recibimos son los trámites de que sigue todo igual que antes” indicó una madre del la escuela.
La comunidad educativa recordó que ya pasaron dos inviernos sin una solución de fondo y que pese a la reunión judicial con la participación del fiscal Gerez, la empresa en quiebra Lucaioli y el Banco Galicia, los compromisos firmados en un acta acuerdo nunca fueron materializados.
Los padres, docentes y estudiantes exigen una respuesta urgente. “El frío no espera y la educación no puede estar suspendida por una falta de definición burocrática. Queremos volver a nuestra escuela” concluyeron.