
Margarita Bravo, la madre del niño, relató este jueves en Radio 7 que recibió una llamada de la escuela informándole del incidente: «Aproximadamente a las 9:30 me llaman desde la escuela que mi hijo se había golpeado», contó.
Al llegar a la escuela, encontró a su hijo en muy mal estado. «Se acercó a mí y casi no se mantenía parado. Me dijo, ‘mamá, me duele, me duele’», recuerdó.
Ante la gravedad de la situación, decidió llevar a su hijo a una clínica en Neuquén, donde se determinó la seriedad de sus heridas y le dijeron que se trataba de un caso «gravísimo».
El niño fue diagnosticado con un traumatismo esplénico grado 4 y una hemorragia interna y permaneció tres días en terapia intensiva.
Margarita también expresó su indignación por la presencia de un perro dentro de la institución escolar y la falta de comunicación por parte de las autoridades escolares después del incidente. «Desde la institución nunca me llamaron. La única que me llamó y se acercó a ver como estaba fue su seño de aula».
A su término, dejó en claro que espera que se esclarezcan los hechos y se determinen responsabilidades por lo ocurrido.