En medio de una crisis financiera sin precedentes, el gobernador Alberto Weretilneck tomó medidas drásticas en Río Negro. La planta política no recibirá el aguinaldo, mientras que la administración pública lo percibirá en dos cuotas, según lo anunciado hoy.

El comunicado emitido por el Ministerio de Hacienda destaca el «esfuerzo significativo» para cumplir con las obligaciones financieras y saldar millonarias deudas adquiridas anteriormente por la provincia. Weretilneck, desde el inicio de su mandato, definió las prioridades, concentrándose en los sectores de Salud y Seguridad.

El enfoque principal es la adquisición de suministros esenciales para los hospitales públicos y la reducción de la deuda del Instituto Provincial del Seguro de Salud (IPROSS) con el sector privado. Se destaca la urgencia de poner en funcionamiento hospitales desabastecidos.

Asimismo, Weretilneck se compromete a garantizar el servicio de seguridad, proporcionando elementos para prevención y emergencias. Esto incluye el despliegue del operativo de verano 2024 en los centros turísticos, no solo para la policía, sino también para los combatientes del SPLIF, Bomberos Voluntarios y el Servicio Penitenciario Provincial.

En un intento por reactivar la economía local, se están cancelando deudas con empresas constructoras para retomar obras paralizadas y garantizar puestos de trabajo.