
Durante la reunión, los productores expusieron la urgente necesidad de contar con agua para regar sus cultivos en un momento clave del calendario agrícola. Si bien se informó que una de las bombas dañadas ya fue reparada y otra podría quedar operativa antes del viernes, los vecinos insistieron en que las medidas provisorias no resuelven el problema estructural.
“Hace 40 años que vivimos con los mismos parches. Necesitamos una obra definitiva para el canal de la Picacita”, expresó uno de los productores presentes.
Los vecinos señalaron que los estudios técnicos ya existen y que solo falta la autorización provincial para construir un nuevo canal que permita garantizar el riego de todo el valle.
“Si seguimos remendando el sistema, dentro de dos años volveremos a reclamar lo mismo”, remarcaron.
La sequía prolongada y los fuertes vientos agravan la situación, afectando los cultivos de alfalfa y otras producciones locales, que requieren agua casi diaria. Por eso, los productores volverán a reunirse esta tarde a las 18 horas para definir los próximos pasos y mantener activo el reclamo.
“No pedimos más paliativos, necesitamos una solución definitiva para producir y vivir dignamente de nuestro trabajo”, resumieron.