La fiscalía solicitó la captura por no presentarse a una audiencia clave; el juicio directo comenzará el 17 de junio.

Dos hombres acusados de participar en un robo agravado en el hotel Hueney Ruca de San Martín de los Andes fueron declarados en rebeldía este jueves, luego de no haberse presentado a una audiencia judicial destinada a revisar las medidas cautelares impuestas. La fiscal del caso, Inés Gerez ordenó la captura inmediata y tuvo el aval del juez de garantías, Maximiliano Bagnat.

El pedido comprendió a N.A.P.H y J.J.C, los dos varones que no se presentaron a la audiencia de la que habían sido notificados, según informó la Oficina Judicial. En consecuencia, el magistrado hizo lugar al planteo del Ministerio Público Fiscal y ordenó su búsqueda y detención.

Sin embargo, los otros dos imputados, identificados como A.M.T y D.M.H sí asistieron a la audiencia. En su caso, se les prorrogó hasta el 30 de junio la obligación de presentarse todos los días en la sede judicial o en la Comisaría local, según corresponda.

Los hechos que motivaron la acusación sucedieron el pasado 30 de abril durante la madrugada, cuando cuatro personas ingresaron con roles acordados al Hotel Hueney Ruca con dirección en la esquina de Pérez y Obeid. De acuerdo a la teoría de la fiscalía, tres de ellos entraron al establecimiento mientras el cuarto oficiaba de “campana”.

Durante el robo, forzaron puertas internas y sustrajeron una caja fuerte, tres televisores, un posnet, un control remoto y una luz de emergencia. Luego de huir, fueron detenidos en distintos en diferentes puntos de la ciudad por la policía provincial, que fueron localizados a partir de los datos aportados por el personal del lugar.

La fiscal Gerez imputó a J.J.C, A.M.T y D.M.H como coautores del robo, mientras que N.A.P.H fue acusado como partícipe primario. El hecho fue calificado como robo agravado por haberse cometido en poblado y en banda.

En la misma audiencia del 30 de abril, el Ministerio Público Fiscal solicitó que la causa sea tramitada por juicio directo, figura legal que permite avanzar al juicio sin etapa intermedia de investigación, al considerar que toda la prueba ya ha sido recolectada. Este pedido fue aceptado, y el debate oral fue fijado para el 17 de junio con intervención de un tribunal colegiado.

Las pruebas recolectadas por la fiscalía y la policía, se incluyen registros fílmicos de cámaras de seguridad y testimonio de testigos presenciales, que serán parte del juicio.