De esta forma, en siete meses de 2025 la suba de precios acumulada es de 18,1%, mientras que con relación a julio del año pasado el incremento es de 40,9%.

El dato de la Ciudad está por encima de las proyecciones de las consultoras privadas que hablaban con una inflación a nivel nacional del orden de 1,8%.

Este incremento es producto de un alza de 1,2% en bienes y 3,3% en los servicios.

En otra de las divisiones, los precios estacionales avanzaron 9%, los regulados 2,1% y el resto 1,9%.

Los rubros de mayor aumento fueron: restaurants y hoteles (5,3%), servicios financieros (3,8%), transporte 3,6% y recreación y cultura (3,6%), vivienda (2,3%).

Los alimentos tuvieron un incremento de 1,8%. Los principales impulsos provinieron de verduras, tubérculos y legumbres (6,9%), carnes (1,2%) y pan y cereales (1,6%).

En el mantenimiento de la vivienda se registró una suba de 2,3% por el impacto de las actualizaciones en los valores de los alquileres y de los gastos comunes por la vivienda.

En tanto, transporte promedió un incremento de 3,6%, debido a las alzas en los precios de los pasajes aéreos. Le siguieron, en importancia, los ajustes en los valores de los combustibles y lubricantes para vehículos de uso del hogar y del boleto de colectivo urbano.

Salud mostró un alza de 1,8%, producto de alzas en las cuotas de la medicina privada.

En educación se estimó un aumento de 2%, por el ajuste de las cuotas de los colegios privados.

El aumento de 5,6$ en “restaurantes y hoteles” es resultado de los incrementos en las tarifas del servicio de alojamiento en hoteles por

motivos turísticos y en los precios de los alimentos preparados en restaurantes, bares y casas de comidas.