
El viernes Israel dio inicio a la Operación “León Naciente” en territorio iraní. Según reportes, en pocas horas, el Ejército israelí asestó un duro golpe al régimen de los ayatolás, atacando instalaciones nucleares y eliminando a parte de su cúpula militar. Ante esta situación, el teniente coronel Nadav Shoshani, portavoz internacional de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), comentó en redes sociales: «Están tratando de crear una narrativa falsa de victoria y no les está saliendo muy bien».
Entre las afirmaciones que el régimen iraní difundió y que fueron desmentidas, se encontraba la noticia, reportada por medios persas como el Tehran Times y la agencia estatal IRNA, sobre el presunto derribo de cazas israelíes F-35.
Sin embargo, Shoshani refutó categóricamente estas versiones, asegurando que «no existió tal derribo«. Incluso, Irán había informado el derribo de un tercer caza y la supuesta detención de su piloto, una noticia que también fue calificada de falsa.
En contraste, el general de brigada Effie Defrin, afirmó que en menos de dos días la Fuerza Aérea israelí había logrado el control del espacio aéreo desde el oeste de Irán hasta la capital, con «decenas de aviones [volando] libremente sobre Teherán, gracias al golpe inicial que eliminó la amenaza de los sistemas de defensa aérea iraníes».
La campaña de desinformación también incluyó la utilización de material visual engañoso. En este marco, la Embajada de la República Islámica de Irán en Venezuela (@Eiranencaracas) publicó un posteo en X que mostraba una imagen del lanzamiento de un misil desde un sistema de defensa antiaérea móvil, afirmando el derribo de un «avanzado avión de combate israelí F-35» por parte de los sistemas de defensa iraníes.
No obstante, la veracidad de la imagen en este contexto ha sido cuestionada. De forma similar, otras publicaciones ampliamente difundidas en X que aseguraban mostrar misiles iraníes dirigiéndose hacia Israel fueron desmentidas por Deutsche Welle.
Una búsqueda inversa de imágenes realizada por este medio alemán reveló que la fotografía correspondía a un ejercicio militar iraní de 2021, y que un video similar había sido compartido ocho meses antes, probablemente mostrando un ataque con misiles iraníes contra Israel en octubre de 2024.
Las autoridades israelíes y expertos sugirieron que estos materiales fueron «claramente editados y manipulados con la inteligencia artificial» en un intento de modificar la narrativa de los acontecimientos.