
Una situación de emergencia tuvo lugar en la sede de PAMI ubicada en la calle Irigoyen cuando un hombre de entre 75 y 80 años se descompensó mientras esperaba ser atendido. Se realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) hasta que llegó la ambulancia y fue trasladado al Hospital Castro Rendón, donde confirmaron su deceso.
El episodio tuvo lugar a las 10:40 de la mañana cuando el hombre asistió a la sede de PAMI ubicada en el centro neuquino. El hombre estaba sentado en una silla, cuando se descompensó y cayó al suelo repentinamente. Se llevaron adelante maniobras de RCP mientras se esperaba a la ambulancia, que llegó a las 11:00 hs.
Yolanda Almendra, tesorera del Grupo de Adultos Amancay en diálogo con Noticias 7 expresó: “El estaba sentado, esperando que lo atiendan, era un mundo de gente PAMI. Terrible lo que está pasando, hay que hacer algo porque no puede ser que nos maltraten de esta manera. Cuando salimos estaba ahí tirado, empezaron a hacerle RCP hasta que tomó una bocanada de aire pero volvió a descompensarse”.
El hecho tuvo lugar alrededor de las 10:40 de la mañana y provocó momentos de tensión entre los presentes, quienes fueron evacuados de manera parcial del edificio durante el despliegue del operativo de emergencia. También participó la Policía provincial, que brindó apoyo en las tareas de asistencia y en la organización del tránsito en el sector.
“Nos evacuaron, nos dijeron que fueramos otro día, que nos iban a llamar. Pero era un mundo de gente, que están desde las 7:00 am esperando. Es inconcebible lo que están haciendo, no podemos permitir tanto maltrato” indicó Almendra.
Una vez que arribó la ambulancia del SIEN, el hombre fue derivado al Hospital Castro Rendón, donde el equipo médico intentó reanimarlo con maniobras de RCP. Sin embargo, pese a los esfuerzos, se confirmó su fallecimiento.
“Desde el cambio de gobierno echaron a mucha gente que realmente sabe lo que son las necesidades de los adultos, ahora la gente que está no sirve para nada, te dan vueltas, te pierden los papeles, tremendo el manoseo que nos hacen a los adultos mayores” concluyó Almendra.