Vaca Muerta: qué tienen en común Sauzal Bonito y Oklahoma

A pesar de la distancia, ambos lugares comparten una triste estadística.

A pesar de la distancia geográfica que separa a Sauzal Bonito en Argentina de Oklahoma en los Estados Unidos, ambos lugares comparten una característica inusual: la ocurrencia de sismos como consecuencia de la actividad petrolera.

En el caso de Oklahoma, se registró uno de los sismos más grandes relacionados con la fracturación hidráulica (fracking) con una magnitud de 6 puntos en la escala de Richter. Esta actividad sísmica inusual llevó a las autoridades estadounidenses a cerrar 37 pozos y a iniciar una investigación sobre los sismos inducidos por la actividad petrolera en la región.

En Sauzal Bonito, se sintieron movimientos sísmicos en las viviendas cuando una batería de Vaca Muerta comenzó a extraer recursos a pocos kilómetros de la localidad. Estos movimientos generaron preocupación entre los residentes, pero cesaron cuando se detuvieron las tareas de perforación. Aunque las autoridades neuquinas y las empresas petroleras no han reconocido oficialmente que estos sismos estén relacionados con el fracking, los vecinos experimentaron un aumento en la frecuencia de los movimientos sísmicos desde 2015.

El geógrafo Javier Grosso señala que la cantidad de pozos en los Estados Unidos es significativamente mayor en comparación con Argentina y Vaca Muerta, lo que podría explicar la diferencia en la magnitud y la frecuencia de los sismos en cada región.

«Toda la tecnología que se usa en Estados Unidos, también se utiliza en Vaca Muerta porque las empresas petroleras son las mismas», agregó Grosso.

En este contexto, el periodista peruano Carlos Ortiz, que vive en Oklahoma, sumó más detalles relevantes al informe. «Oklahoma es la localidad que más sismos hay en el país. El más grande de 6 puntos se sintió en otros seis estados cercanos. Actualmente, el fracking sigue siendo una actividad permitida en Estados Unidos. Los sismos son de 2 o 3 grados y casi no se sienten, casi como en Sauzal Bonito», contó. Ortiz finalizó con una clara advertencia. «Esto se trata de una cuestión política y encontrar un reemplazo al fracking».

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