La creciente ola de violencia en hospitales preocupa al personal de salud de la provincia. En una rueda de prensa convocada por la Junta Interna de ATE, se dio a conocer la crítica situación que enfrenta el personal médico en el Hospital Castro Rendón, destacando que este problema no es exclusivo de la capital, sino que se manifiesta en diversos centros de salud de la provincia. Rigo Castaño, movilero de Canal 7, estuvo en el lugar y recopiló declaraciones.

La Dra. Gilda Casagrande, médico del sector de pediatría y guardia de adultos, expresó su preocupación: «Después de la pandemia hemos sufrido un aumento en la violencia hacia el personal de salud. Las guardias comparten pediatría y adulto, y esta violencia se generalizó en ambos servicios».

Casagrande destacó que la violencia proviene de la sociedad en general y se refleja en la población que acude al hospital en busca de soluciones a problemas que no corresponden a servicios de emergencia. «Muchas veces la gente viene exigiendo la solución de su problema, pero este no es el lugar para dar respuesta a todas las necesidades», agregó.

La situación llegó a su punto crítico hace dos semanas cuando una compañera de la Dra. Casagrande fue agredida físicamente, a pesar de la presencia de un policía en la sala de espera. «Esta situación de violencia no se puede permitir», enfatizó la médico.

Ante esta problemática, el personal de salud exige mayores medidas de seguridad, solicitando la presencia de un policía dentro de la guardia, donde ocurren las agresiones. Se busca evitar que hechos como estos se repitan y garantizar un entorno seguro para los profesionales que cumplen con su labor.

Juan Millapan de la Junta Interna de ATE afirmó que esta problemática no es exclusiva del Hospital Castro Rendón y que se vive en muchos hospitales de la provincia. Además, destacó la necesidad de abordar tanto la seguridad como cuestiones internas del sistema de salud para mejorar su funcionamiento.